(Cistus – una familia separada de la familia jara)
La jara se encuentra en la región mediterránea, le gusta el calor y la sequedad y siempre ha sido muy valorada como planta medicinal. Es una de las famosas fragancias de la antigüedad y ya era utilizada como perfume por los minoicos. Huele cálido, dulce y pesado, por lo que nos relaja y calienta; tiene un efecto antiviral y antibacteriano y estabiliza nuestro sistema inmunológico.
"Casi ningún otro aroma tiene un efecto tan cálido y curativo en nuestras almas como el de la jara".
Susanne Fischer-Rizzi